El bautizo es el primer “evento social” en la vida de un bebé, por eso aprovechamos la ocasión para captar un bonito recuerdo de ese día tan especial.
El reportaje comienza media hora antes del horario previsto para la ceremonia. Nos gusta hacer retratos con luz natural del bebé y de los padres.
Es como una “mini sesión” antes de que lleguen los invitados.
En la iglesia cubrimos cada gesto del bebé y sus familiares sin perder detalle de la ceremonia, al ser un momento irrepetible con muchos recuerdos que fotografiar. La sesión fotográfica se complementa en el coctel con panorámicas del ambiente, detalles de regalitos, decoración del lugar, instantáneas de los invitados y fotos de grupos de familiares, conformando un reportaje muy completo con el que inmortalizar el día del bautizo del bebé.